Alimentación

Las colonias salvajes de M. barbarus son fundamentalmente granívoras. Las obreras se encargan de recolectar granos y trasportarlos al nido almacenandolos en el granero. Para alimentarse una obrera va hasta el granero, y trae una semilla que abre en la sala de cria quitandole la cascara. Muchas veces trabajando en equipo varias obreras vierten jugos digestivos en ella y en una cadena de distintas obreras la van convirtiendo en una papilla de la que se irán alimentando todas las obreras, comiendo en grupo. Las larvas no se mueven, son alimentadas por trofalaxia por las obreras. Cuando un alimento es apreciado una obrera se hace cargo de él, se cuelga de una pared sujetandolo con las mandibulas y permanece así días sin que el alimento toque las paredes ni el suelo, y dejando que las obreras que quieran comer de él lo hagan, sin soltarlo nunca, hasta que otra obrera la releva.